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Ácido Málico
El Ácido Málico es un compuesto químico orgánico presente en todos los organismos vivos. También se encuentra en las frutas y es el responsable de su sabor ácido. La palabra “málico” de su nombre deriva de una palabra latina que significa “manzana”, ya que se encuentra principalmente en las manzanas. El Ácido Málico también puede obtenerse sintéticamente: a escala industrial se produce por la doble hidratación del anhídrido maleico. Como aditivo alimentario, es un antioxidante o acidulante conocido como E296.
Aspectos técnicos
El Ácido Málico se presenta en forma de sólido cristalino blanco. Es prácticamente inodoro, pero tiene un sabor agrio. El Ácido Málico es muy soluble en agua, acetona y etanol. Debido a sus propiedades, puede utilizarse como conservante, regulador de la acidez, estabilizador del color y potenciador del sabor.
Nombres alternativos: ácido 2-Hidroxibutanodioico, E296, C4H6O5, malato.
Periodo de almacenamiento
La vida útil del Ácido Málico es de dos años.
Embalaje
Foodcom suministra a sus Socios Comerciales Ácido Málico en sacos de 25 kg.
Aplicación
El Ácido Málico se utiliza sobre todo en la industria alimentaria. Se añade a las bebidas carbonatadas y no carbonatadas para mejorar su sabor a fruta. También mejora el sabor de los productos lácteos acidificados. El Ácido Málico confiere un sabor ácido único a los dulces, como las golosinas. También se encuentra en mermeladas, jaleas y rellenos de frutas.
El Ácido Málico también puede aplicarse como ingrediente en la fabricación de cosméticos. Tiene un fuerte efecto hidratante. El Ácido Málico también tiene excelentes propiedades aclarantes y suavizantes para los productos de cuidado de la piel. Por eso es un ingrediente de peelings, champús para el cabello o cremas. En la industria farmacéutica, el Ácido Málico se utiliza en pastillas para la garganta o jarabes para la tos para mejorar el sabor de las frutas y suavizar el efecto gustativo de los principios activos.
