- La función de los ingredientes de los cosméticos es prolongar su vida útil y conferir características específicas al producto, dependiendo de la función del cosmético y de su uso previsto.
- La formulación de las fórmulas cosméticas tiene como objetivo no sólo satisfacer las expectativas del cliente, sino también cumplir los requisitos de seguridad.
- Los ingredientes de los cosméticos pueden dividirse en sustancias activas, sustancias base y excipientes.
- En los productos cosméticos se pueden encontrar: conservantes, tensioactivos, emulgentes, humectantes o texturizantes.
Composición de los cosméticos
Los cosméticos tienen muchos ingredientes cuya función es prolongar su vida útil y conferir al producto características específicas. La composición depende de la función del cosmético y de su finalidad: algunos ayudan a hidratar la piel, mientras que otros la protegen de factores externos nocivos.
Sin embargo, es importante recordar que la formulación de los cosméticos no sólo pretende satisfacer las expectativas de los clientes, sino también cumplir estrictos requisitos de seguridad. En este punto, cabe mencionar que todo cosmético debe llevar una descripción de los ingredientes según el sistema de nomenclatura INCI (Nomenclatura Internacional de Ingredientes Cosméticos). La inclusión de nombres según INCI en la etiqueta o el envase es importante en el proceso de desarrollo de cosméticos, ya que permite descifrar el contenido de ingredientes de un producto determinado, independientemente de dónde se haya producido. Utiliza nombres químicos en inglés y nombres de plantas en latín. Los ingredientes cosméticos se enumeran por orden, empezando por los que se utilizan en mayor cantidad y terminando por los que se utilizan en menor cantidad.
¿Qué sustancias pueden añadirse a los productos de la industria cosmética? A continuación encontrará un resumen de los ingredientes de los cosméticos y sus funciones.
Tipos de ingredientes de los cosméticos
Los ingredientes de los cosméticos pueden dividirse de varias maneras. Los más generales pueden distinguirse entre:
- sustancias activas,
- sustancias básicas,
- excipientes.
Las sustancias activas, también llamadas principios activos, son responsables del funcionamiento del producto, mejorando el estado de la piel. Tienen un efecto directo sobre la epidermis y desempeñan funciones cosméticas específicas, es decir, hidratan, nutren, calman la irritación o iluminan la piel. Ejemplos de estas sustancias son las vitaminas, los péptidos, el ácido hialurónico o la coenzima Q10.
Por otro lado, las sustancias base son aquellas sin las cuales no se podría fabricar un cosmético. Son disolventes de las sustancias activas e incluyen agua, alcoholes o aceites vegetales. En la mayoría de los cosméticos, el agua es el disolvente más utilizado. Puede disolver una gran variedad de sustancias químicas y es seguro para la piel. Sin embargo, es importante recordar que, para que cumpla todas sus funciones, primero debe purificarse adecuadamente. Otros disolventes son el etanol, el propilenglicol o la cera líquida.
Para que el cosmético adquiera una consistencia determinada y se mantenga fresco durante más tiempo, se le añaden sustancias auxiliares. Entre estos ingredientes se encuentran los emulsionantes, los espesantes o los conservantes. Los cosméticos también pueden contener colorantes y fragancias. En la fragancia de los productos influyen los aceites esenciales vegetales o la vainillina sintética.
A continuación se presentan ejemplos de los tipos de sustancias que se añaden a los cosméticos y sus funciones.
Conservantes
La principal función de los conservantes en los cosméticos es prolongar su vida útil. Los cosméticos contienen agua e ingredientes vegetales, lo que favorece el crecimiento de microorganismos. Además, a menudo entran en contacto con la piel y el aire, donde hay muchas bacterias. Los conservantes impiden el crecimiento de microorganismos en los cosméticos. Su ausencia puede hacer que los cosméticos resulten irritantes para la piel y tengan una vida útil más corta o tengan que almacenarse en condiciones estériles. Los conservantes pueden dividirse en naturales y artificiales.
Un ejemplo de conservante que se añade a los cosméticos es el benzoato sódico. Se trata de la sal sódica del ácido benzoico, un ingrediente conservante que reduce el crecimiento de bacterias, hongos y moho, evitando que los cosméticos se estropeen y prolongando su vida útil. ¿Quiere saber más sobre los usos del benzoato sódico? No deje de leer nuestro artículo sobre el tema.
Otro conservante que se añade a los cosméticos es el ácido fórmico. Se trata de un ácido carboxílico que, cuando se añade a los cosméticos, regula su pH y prolonga su vida útil. Además, puede actuar como ingrediente en perfumes para compensar los olores desagradables de otros ingredientes. Puede leer más sobre el ácido fórmico en nuestro artículo.
Colorantes
Los colorantes también se añaden a los cosméticos para dar a los productos un aspecto atractivo o para añadir el color deseado a la piel, en el caso de los productos de maquillaje. Los colorantes pueden dividirse en naturales, derivados de plantas, como la clorofila, los carotenoides o la henna. En cambio, los colorantes sintéticos más conocidos que se añaden a los cosméticos son el dióxido de titanio y el óxido de zinc.
El dióxido de titanio es un compuesto químico inorgánico también conocido como blanco de titanio por sus propiedades abrillantadoras y blanqueadoras. Se utiliza a menudo en la fabricación de productos de maquillaje como polvos, bases y sombras de ojos.
El óxido de zinc tiene un efecto muy similar. No sólo se caracteriza por sus propiedades blanqueadoras, sino también por sus propiedades matificantes y opacas, por lo que es frecuente encontrarlo en la formulación de polvos y polvos de maquillaje. Pero el óxido de zinc no es sólo un agente colorante en cosmética: también tiene un efecto antibacteriano y secante, por lo que se utiliza a menudo en productos para el acné y la piel inflamada.
Tensioactivos
Los tensioactivos [https://foodcom.pl/es/product-category/tensioactivos/] son agentes que tienen muchas propiedades utilizadas en la industria cosmética. En primer lugar, tienen la capacidad de formar espuma y poseen propiedades limpiadoras. También son sustancias humectantes y emulsionantes.
Los tensioactivos más comunes son el lauril sulfato sódico y el lauril sulfato sódico, pero los tensioactivos en cosmética también incluyen el bicarbonato sódico. Tiene propiedades espumantes, por lo que se añade, por ejemplo, a las bolas de baño efervescentes.
Emulgentes
Los emulsionantes son compuestos que permiten que dos sustancias inmiscibles (agua y aceite) se combinen. Tienen una parte hidrófila soluble en agua y una parte hidrófoba soluble en aceite. Así, cuando se añade un emulsionante a una mezcla de aceite y agua, permite que los dos líquidos se mezclen, creando una emulsión homogénea al reducir la fuerza de repulsión entre sus moléculas. Gracias a la adición de emulgentes, los cosméticos no se deslaminan, lo que aumenta la vida útil del producto.
El polisorbato 20 es un emulgente habitual en las fórmulas cosméticas. Es una sustancia que estabiliza las emulsiones O/W, es decir, aquellas en las que el aceite está disperso en agua. Las lecitinas, que son mezclas de glicerolfosfolípidos que también se encuentran de forma natural en el cuerpo humano, tienen un efecto muy similar.
Humectantes
Los humectantes son sustancias que tienen un fuerte efecto hidratante. Son capaces de retener el agua en la piel y evitar su pérdida. Son sustancias higroscópicas, lo que significa que tienen la capacidad de absorber agua del ambiente y retenerla en la capa externa de la epidermis durante más tiempo. Debido a sus propiedades, también suelen añadirse a los productos para el cuidado del cabello.
Un ejemplo de este tipo de sustancias es el glicerol, también conocido como glicerina. Hidrata frenando la evaporación del agua de la epidermis. El glicerol se utiliza en casi todos los productos cosméticos: cremas, lociones, geles y barras de labios. Es más, además de su efecto positivo sobre la piel, también tiene un efecto beneficioso sobre las propiedades del propio producto, ya que evita que se seque.
Otro humectante es la urea. Sus principales propiedades son unir las moléculas de agua de la epidermis y protegerlas de la evaporación. De este modo, influye en el estado de la capa hidrolipídica, que protege la piel de la sequedad y de los efectos negativos de los factores externos.
Texturizantes
Los texturizantes, o modificadores de la textura, se utilizan para obtener o mantener una determinada textura o consistencia en los cosméticos. Entre ellos se encuentran principalmente los espesantes, que no sólo hacen que los cosméticos no queden demasiado líquidos, sino que también aumentan la viscosidad.
La goma xantana influye en la textura de los productos cosméticos. Su función es aumentar la densidad, la viscosidad y la plasticidad. El efecto de la goma xantana es duradero y no se ve afectado por las bajas temperaturas. Además, también funciona en cosméticos con un pH ácido.
El almidón de maíz natural también se utiliza en cosméticos para espesar su textura. Se añade a productos diseñados para el cuidado facial.
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